¿MAL CRISTIANO?

                                                                                                                                        por Boris Elkin

      Poesía recitada, con fondo musical de guitarras, por uno de los gauchos de los que trabajaron en la cosecha en la chacra de mi tío León. 

   ¿Que no soy güen cristiano? -usté me dice- / porque no rezo pa Semana Santa  

   y en lugar de pasarla a bacalao / me como un churrasquito como si nada. 

   Es juerza de la costumbre, solamente. / Los crioyos de mi laya 

   si no tienen asao lindo y jugoso / pa darle rienda a las quijadas,

   se sienten como enfermos, apocaos / y hasta le dentran a temblar las tabas.

   ¿Qué es pecao no rezar? No es culpa mía, / yo no he tenido quien me enseñara

   y pa aprenderlo solo, no he podido / ya que de leer no entiendo ni una palabra.

   Además, a mi ver, debe rezarse / cuando una voz se enanca en el alma;

   cuando una voz de adentro reprocha / por alguna mala acción echa en cara,

   yo, gracias a Dios, llegué a viejo / sin manchar mi facón de sangre hermana;

   no he robao, ni lo pienso; / mi palabra de gaucho es más sagrada

   que mesmo documento que se escribe / y que al final… no sirve ni pa nada.

   Mi rancho pa´l cansao no tienen puertas, / a naides le he negao pan, ni agua,

   ni el pedazo e churrasco que hoy me dicen / que comerlo es pecao esta semana.       
   Tampoco he codiciao prenda ajena / ni la fortuna que el vecino gana,

   ya que parece estar de Dios escrito, / que los gauchos de ley no tengan nada.

   Pero no maldigo contra naides / ni me arrodillo pa pedirle gracia.

   ¡No es pecao no rezar pa quien no sabe, / ni es pecao no rezar si no hace falta!

   ¡Que niego a Dios… ¡Eso es mentira! / No es tanta mi ignorancia,

   siento que Dios está en todas partes: / en el valle, en la montaña,

   en el calor que dora los trigales, / en la lluvia, en el viento y en la helada.

   ¿Qué yo niego a Dios? … ¡Qué viá negarlo!  

   Si en las horas oscuras de la Patria, / después de darle luz al pensamiento

   a los hombres nacidos pa liberarla, / ¡Dios estuvo en el filo e los machetes,

   en las chuzas puntudas de las lanzas, / en el clarín que manda a la pelea 

   y en el coraje de la raza gaucha!